¿Qué es un cheque de terceros?
Generalmente, cuando usted cobra un cheque, lo lleva a un banco, cooperativa de crédito o tienda de cobro de cheques con su nombre. El emisor del cheque lo extenderá a su nombre, de modo que usted es la única persona que puede cobrar ese dinero. Sin embargo, esto no siempre es así.
A veces, una persona puede extender un cheque por ti, y tú puedes firmar ese cheque a una tercera persona, dejándolo en sus manos. Esto es lo que ocurre con los cheques de terceros: cuando la persona A extiende un cheque a nombre de la persona B, pero la persona C cobra ese cheque.
La comprobación por terceros es posible porque la persona B puede escribir instrucciones en el cheque, cambiando la parte a la que se extiende el cheque para que sea la persona C.
Los cheques para terceros no son la norma, pero son útiles en varias situaciones:
Cuando se comete un error en el cheque original. Si el emisor original del cheque comete un error, y sería difícil escribir un nuevo cheque, el receptor escrito del cheque puede firmarlo a otra parte, corrigiendo el error con facilidad.
Si el destinatario original no tiene cuenta bancaria. A veces los cheques se extienden a personas que no tienen cuenta bancaria.
Esto significa que esta persona no puede depositar el cheque y, aunque puede cobrarlo, el proceso puede ser menos ágil. Esto es especialmente útil en el caso de los cheques emitidos a favor de menores, para que sus padres puedan mantener el dinero a salvo hasta que crezcan.
Como forma de pago. Si le debe dinero a alguien y recibe un cheque de otra persona por la cantidad que le debe, puede ser más conveniente firmar ese cheque a la parte adeudada, en lugar de cobrarlo usted mismo y escribir un nuevo cheque.
Riesgos y problemas: Por qué los bancos no siempre aceptan los cheques terceros
Es fácil confundir los cheques de terceros con el fraude con cheques, pero no es necesariamente así. Existen formas legales para que una tercera persona pueda cobrar un cheque que no fue emitido inicialmente a su nombre.
Sin embargo, muchos bancos y cooperativas de crédito siguen sospechando de los cheques para terceros. Debido al riesgo asociado a este tipo de cheques, un banco puede negarse a cobrar un cheque de terceros que usted traiga. Al cobrar un cheque de terceros, es importante recordar:
Los bancos no están legalmente obligados a aceptar sus instrucciones. Los cheques para terceros incluyen un cambio de destinatario con la firma del destinatario original endosando la alteración. Sin embargo, los bancos no están obligados a seguir estas instrucciones ad hoc, y muchos pueden optar por no hacerlo debido al riesgo que conlleva o sólo pueden hacerlo en función de cada caso.
Los cheques para terceros son más vulnerables al fraude. Imagine lo siguiente: se le cae un cheque en la acera. Este cheque fue emitido a su nombre por 100 dólares.
Sin embargo, una persona indecorosa encuentra el cheque y tacha su nombre, sustituyéndolo por el suyo y falsificando su firma para dar un aire de legitimidad a su fraude. El riesgo de este tipo de fraude hace que muchos bancos desconfíen de los cheques para terceros.
Póngase en contacto con su banco antes de presentar un cheque de terceros. Si no está seguro de si su banco acepta o no cheques terceros, póngase en contacto con él antes de acudir a cobrar el cheque. El banco puede tener instrucciones especiales para los cheques de terceros, si es que los aceptan.